Al pensar en esta ciudad para invertir, se puede tener en cuenta los sectores con mayor proyección, como pueden ser los servicios de tercerización, de software y TI, la logística, o la infraestructura hotelera y turística. Aunque también están en pleno desarrollo la agroindustria con productos como el chocolate y los alimentos procesados, y la manufactura con los materiales de construcción y automotriz.
Por otro lado, Cali en este momento se posiciona como centro de negocios gracias a la presencia de sus zonas francas, como la Pacifico, la Palmaseca o la Buenaventura. Que ofrecen soluciones inmobiliarias a medida, buena infraestructura, cobertura de internet por fibra óptica, y espacios modernos y con seguridad para los emprendedores.
Además, en los últimos años ha sido reconocida como una de las ciudades más baratas de Latinoamérica para invertir en inmuebles. El estudio la comparó con otras veinte ciudades, entre las que se encuentran Medellín, Arequipa y Cuenca. Por lo que si el interés es en la oferta de alquiler de oficinas en Cali, se puede encontrar un precio muy competitivo, así como a la hora de encontrar casas a la venta o apartamentos en arriendo.
El mercado inmobiliario del Valle de Cauca está en expansión. La llegada de capitales extranjeros y la nueva disposición de los recursos nacionales por parte de la Cámara de Comercio, están incrementando la capacidad colombiana para la construcción. Por lo que es posible encontrar cada vez más proyectos de vivienda, centros comerciales y edificios para alojar oficinas y negocios.
Al mismo tiempo, la vivienda usada tiene precios muy competitivos, y la mano de obra calificada para realizar reformas está actualizada para poner a la altura de cualquier edificio moderno, oficinas para la venta o el arriendo. Lo que convierte al mercado inmobiliario de Cali, y de Colombia, en muy atractivo para los inversores.
Además de brindar un beneficio extra a aquellos que abren sus negocios en esta ciudad. Ya que el movimiento de turistas y los trabajadores en la búsqueda de nuevas oportunidades laborales, retroalimentan el sector de servicios y de producción.